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Iglesias románicas del valle de bohí
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El estrecho Valle de Boí está situado en los altos Pirineos, en la comarca de la Alta Ribagorça, y está rodeado de escarpadas montañas. Cada pueblo del valle contiene una iglesia románica y está rodeado por un patrón de campos cerrados. En las laderas más altas hay extensas tierras de pastoreo de uso estacional.
Узкая, в окружении крутых гор, долина Валь-де-Бой находится в высокогорье Пиренев, в районе Альта-Рибагорса. Каждая деревня в этой долине имеет романскую церковь и окружена сетью огороженных полей. На более высоких склонах находятся обширные, используемые сезонно, пастбища.
El Valle de Boí está situado en el Pirineo catalán, en la comarca de la Alta Ribagorça, a 120 km al norte de Lleida, en el noreste de la Península Ibérica. El estrecho valle está rodeado de escarpadas montañas y cada uno de los pueblos que lo componen contiene una iglesia románica.
Como grupo, estas iglesias representan un ejemplo especialmente puro y consistente de arte pictórico y arquitectura en el estilo románico lombardo. Fueron construidas entre los siglos XI y XII bajo el patrocinio de los señores de Erill, y son inusuales por su ubicación en la periferia de sus respectivos pueblos antiguos y también por la riqueza de la decoración pictórica interior.
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Esta ruta se inicia en la localidad de El Pont de Suert, capital de la comarca de la Alta Ribagorça y puerta de entrada al valle de Boí. Conserva su casco histórico medieval, con edificios como el palacio Abacial y la antigua iglesia de Santa María.
Esta ruta se puede realizar en un solo día, y nos llevará a las nueve iglesias principales del valle. La riqueza de los elementos decorativos y el excelente estado de conservación de estos edificios hacen que sea la oportunidad perfecta para descubrir algunos de los mejores ejemplos del arte románico catalán.
Salimos de El Pont de Suert por la carretera N-230 hacia el valle de Arán. Cinco kilómetros más adelante, una carretera local nos lleva al pueblo de Cóll. Aquí se encuentra la primera de las iglesias románicas del valle de Boí, la iglesia de la Assumpció, del siglo XII.
A continuación, volvemos a la carretera principal y continuamos en dirección norte hasta el pueblo de Cardet, donde se encuentra la iglesia de Santa María, reformada en época gótica y con un campanario barroco. Nuestra tercera parada es a tan sólo dos kilómetros, en Barruera, el pueblo más importante de la comarca del valle de Boí, y donde se encuentra la iglesia de Sant Feliu.
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Una de sus principales características es la unidad de estilo arquitectónico. Son construcciones realizadas durante los siglos XI y XII siguiendo los modelos del norte de Italia, el románico lombardo, que se caracteriza por la funcionalidad de sus construcciones, el cuidadoso trabajo de la piedra, los esbeltos campanarios de torre y la decoración exterior de arcos ciegos y bandas lombardas.
El románico del Valle de Boí es excepcional por la concentración en un espacio reducido de un número tan elevado de iglesias del mismo estilo arquitectónico, conservadas a lo largo del tiempo con pocas modificaciones que hayan alterado significativamente su concepción inicial.
En la Vall de Boi también se puede disfrutar de innumerables actividades al aire libre como el senderismo entre los pueblos y dentro del Parque Nacional, rutas en bicicleta, rafting, barranquismo, puntos panorámicos, paseos por el Salencar, rutas termales en el Balneario de Caldas de Boi, Ski-in Boi Taull, en verano disfrutar del sol y la naturaleza en cualquiera de las dos piscinas (Boi y Barruera), y un sinfín de actividades más que ofrece este fantástico Valle.
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El pintoresco entorno de estas iglesias, con sus esbeltas torres que contrastan con el telón de fondo de los Pirineos, es el punto más fuerte de esta WHS. La mayoría de los pueblos a los que pertenecen también tienen un bonito aire medieval. Por desgracia, los murales originales se han llevado (“conservado”) a museos de ciudades catalanas más grandes, como Barcelona.
Pasé la noche en Erill la Vall. Aquí visité el Centro de Información del valle de Boí. Se proyecta un vídeo que te da una idea de cómo y por qué surgieron estas peculiares iglesias, y por qué aquí. Supongo que estos peregrinos catalanes estaban celosos del arte y la arquitectura que veían en Roma y el norte de Italia, y querían llevarse algo de ello a casa. Esto dio lugar a la “importación” de constructores y artesanos lombardos.
El Valle de Boi es un estrecho valle de los Pirineos y es conocido sobre todo por sus nueve iglesias románicas. La alta densidad de arquitectura románica pura, alejada de las grandes ciudades y de las principales rutas comerciales, su ubicación en un entorno rural y el pintoresco paisaje montañoso son las características de este SMR.